«Sol con luna, mar con bosques» campos floridos, de día, de noche. el mar llegando a rozar los pinos, aromas de verano. promesas de tiempos mejores, de piernas desnudas, de pasos veloces. promesas de noches de luna, de bosques amables, de miradas dulces, de cantos y encuentros. promesas de tierra firme, de senderos. promesas a la vuelta de la esquina, de esas que se tocan con la mano. dejar la mirada perdida, caminar hasta nuevos horizontes, los pies mullidos, la tierra fresca. promesas de aguas que corren, de vida que consuela.
a partir de un verso de Sandro Pena del poema «Una extraña alegría de vivir»