Olas y olitas

publicado en: Blog, momentos, personal, poesía | 0

 

de madrugada. pasan las horas. doy vueltas bajo las sábanas cada vez más arrugadas, arremolinadas. me sumerjo en  el  interior de una enorme caracola blanca. torbellino que me absorbe. soy la ola. la ola rizada, encabritada, la que galopa, y golpea con fuerza en la roca, una y otra vez. la que arroja espuma, espumarajos por la boca. la que me voltea y arrastra, la que va y viene sin tregua. la ola que inunda cada uno de los poros de mi piel en la noche de gran  luna, en la noche de ausencias, en la noche del grito ahogado. soy la que se deja zarandear por el oleaje repentino cuando el sueño no llega, cuando las bestias rugen, cuando no hay descanso, cuando me quedo inmóvil como única salida y dejo que el mundo se desmorone y todo caiga a pedazos. como después de la explosión, miles y miles de trocitos cayendo en cámara lenta.

la que recuerda las palabras de otros tiempos como un eco en la noche que vuelve, como un destello sin rostro,

animal herido

despierto en la noche

sabiéndote vivo

respira tu vientre pegado a la tierra

no muevas ni un dedo

quédate dónde estás

hasta el sueño

a muerte

 

y luego todo desaparece. y llega el silencio. el silencio suspendido. el limbo donde flotan las almas inocentes, encarnadas criaturas aun no nacidas, limbo de un color azul oscuro (casi negro) como el mar en lo profundo.

en el vaivén materno mecida, nadando en las aguas tibias, escucho el latido del universo, soy el latido mismo. la ola en calma que lame con amorosa delicadeza cada uno de los dedos de tus pies en la orilla, cual beso pausado, prometedor, caricia inocente como la brisa en la nuca, tus dedos por mi espalda .la que contempla el ir y venir. la que se aleja dejando sus huellas en la arena mojada. la que sabe que al mar no le importa si es de día o de noche.

sueño con delfines, en un sueño profundo y duermo como un bebé hasta que la luz de la mañana lo inunda todo y me dejo flotar en la promesa de un nuevo día .

 

Texto y foto: Ina Dunkel